jueves, 8 de julio de 2010

Cabreo.

Estoy tremendamente cabreado estos dias , me he dejado la piel en el trabajo durante meses ,he hecho el trabajo de varias personas y muchisimo mas de lo que cabria esperar de un empleado. Y lo unico que he obtenido ha sido una patada en el culo a la finalizacion de mi contrato . Porque las putas empresas y los empresarios canarios lo unico que quieren son mercenarios , desde luego que la crisis la estamos pagando los trabajadores , humildes que intentamos llegar a fin de mes . Los putos ricachones que han especulado con el ladrillo siguen viviendo a cuerpo de rey . El mundo es un asco , un enorme asco y lo que mas pena y mas me hunde es que mi hijo tendra que crecer y defenderse en este mundo de tiburones e inutiles . A todo aquel que lo quiera leer o lo busque que lo tenga claro , santana cazorla y paradise hotels and resorts o cualquier otro nombre que le pongan en el futuro son unos explotadores , abusadores y mil cosas mas que podria poner o explicar tanto cosas que me han pasado a mi como las que he visto en todo este tiempo que he trabajado para ellos . Pero que no merece la pena que les dedique mi tiempo . Lo unico que deseo es que en el futuro las cosas cambien y los empresarios canarios traten a los empleados correctamente para que estos se involucreen y traten a las empresas como propias y a los clientes que son tambien los estafados. Y es que por culpa de empresas de este tipo cada vez viene menos turismo a gran canaria , como es posible que un cliente que paga mas de 70 e por alojarse en un hotel con todo incluido tenga un presupuesto para comidas de solo 5,50e , es autenticamente vergonzoso . Ya no quiero ni escribir mas , solo borron y cuenta nueva y que mi hijo tenga un futuro mejor fuera de estas islas que son un peor que el infierno .

1 comentario:

  1. ¡Hola Luis!, la verdad es que no puedo estar más de acuerdo con lo que escribes. De todos modos, sólo quería decirte que no desistas, son tiempos muy jodidos los que nos ha tocado vivir.
    Mantén la moral hasta que pase la tormenta.
    ¡Un abrazo!

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